sábado, 23 de marzo de 2013

Tatcher: las dos guerras que ganó

 

La unidad que el Partido Conservador de Reino UNido intentó proyectar durante el conflicto de las Malvinas de puertas afuera no existía de puertas adentro. Los papeles privados de la entonces primera ministra Margaret Thatcher, hechos públicos este viernes, revelan enormes tensiones dentro del grupo parlamentario y diferencias de opinión también dentro del Gabinete. Desde el diputado que explica que sus votantes “quieren sangre” hasta el asesor que propone que los argentinos compren las Malvinas manteniendo a los isleños o el ministro que advierte que una guerra sería “un nuevo Suez”, Thatcher tuvo que librar dos guerras en aquella primavera de 1982: una contra los argentinos y otra contra su propio partido. Hoy sabemos que Tatcher tuvo primero que superar una guerra interna, para ganar una externa.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Die Toten Hosen: 30 años como estos

 

La banda alemana de punk rock Die Toten Hosen cumplió tres décadas de trayectoria e hizo su presentación número 28 en el país -récord para un grupo de música internacional, título que tenían los Ramones- pero, afirman que en lo profesional, todavía se sienten inseguros a la hora de volver a tierras pampeanas. “Antes de viajar a Buenos Aires siempre nos ponemos muy nerviosos y pensamos si esta ocasión será tan buena como la última vez”, asegura Breiti, guitarrista de la banda.

 
  Seis horas: ese fue el tiempo que necesitaron los fans argentinos de la banda alemana Die Toten Hosen para agotar las entradas del show del martes 11 de septiembre en el Teatro Vorterix. Un concierto especial (“solo para fanáticos”, decía el afiche publicitario) en el cual se festejaron los 20 años de esta relación hosenesco-argentina que comenzó allí por el año 1992, en la extinta discoteca Halley de avenida Corrientes. “El lugar estaba vacío y ya nos sentíamos decepcionados. Pero después, no sé cómo, se llenó completamente de gente que ya nos conocía y fue una noche increíble”, recuerda el carismático Campino (50), cantante y líder de la banda de Düsseldorf. 
  Risas apostadas que maltratan tímpanos ajenos, brindis cada ocho ó nueve minutos con vasos que rebalsan de cerveza, brillantes cabelleras rubias y zapatillas de trekking: el Teatro Vorterix fue testigo de un importante grupo de fanáticos alemanes (aproximadamente 400) que vinieron especialmente para ver a sus ídolos, los mismos que les recomendaron esta travesía sudamericana. “Podés haber presenciado un show de los Hosen en cualquier parte del mundo, pero si no los viste en Argentina, te perdiste lo mejor”, asegura Campino, que no puede creer cómo aquí se corean los punteos de las guitarras y que se ríe de la frase que se le dice a una persona aquí, cuando se le quiere desear suerte (“mucha mierda").
  “Olé, Olé, olé, olé… Joseee, Joseee”, canta la muchachada local que pronuncia con ausencia de acento germánico el nombre de la banda. “Nos sentimos orgullosos y respetamos a los argentinos por el esfuerzo que hacen para entender nuestras letras. Cuando los vimos por primera vez cantar nuestras canciones se nos puso la piel de gallina”, afirma Campino, que comenzó a estudiar español y puede darse cuenta de ello en la versión en castellano del corte de su último álbum “Ballast der Republik”, “Tage wie Diese(“Días como estos), dedicada especialmente a sus seguidores argentinos.
  Con viento, marea y tiempo en contra, dos fanáticos de la banda crearon un grupo de Facebook para proponer que se designe a los DTH como Huéspedes de Honor de la Ciudad Buenos Aires. Ante la urgencia por conseguir el objetivo antes que la banda deje el país, se comunicaron con la legisladora María José Lubertino, quien estuvo de acuerdo con la condecoración e impulsó la medida, que ya es oficial, desde su banca. Los Hosen, por ahora, están a la espera de la ceremonia en la cual se les otorgará aquella distinción, y que si no se realiza en la Legislatura porteña, podría celebrarse en su mismo concierto del sábado 15 en el estadio Malvinas Argentinas, show que ya está agotado.

viernes, 20 de julio de 2012

“Los periodistas ya no podemos ser sabelotodos”

El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) realizó una conferencia acerca del nuevo proceso periodístico en la era digital. Tom Johnson, profesor de periodismo en la Universidad de San Francisco (Estados Unidos) y co-fundador del Institute for Analytic Journalism, fue quien llevó a cabo esta charla que tuvo como punto de partida aquellos cambios a los que, según él,  la profesión se tendrá que adaptar. “Los periodistas tendrán que aprender permanentemente nuevas habilidades”, aseguró Johnson. Pirámide sin invertir se hizo presente en esta reunión que tuvo lugar en el auditorio de la Universidad de Palermo (UP).

“Ya no estamos en el negocio de presentar las noticias tradicionales”, dijo sobre los nuevos mecanismos digitales en el periodismo, Tom Johnson, profesor emérito de Periodismo en la Universidad del Estado de San Francisco y co-fundador del Institute for Analytic Journalism. Johnson explicó que con las nuevas tecnologías la sociedad tiene más libertad a la hora de consumir medios. “Hoy la audiencia determina lo que quiere ver y decir. Actualmente hay aplicaciones en los celulares que permiten saltear las publicidades del programa que se está viendo. El comercio quedó en segundo plano”.
Johnson formuló un claro análisis en el que ofreció distintas razones por la que los periodistas, a raíz de la revolución digital, ya no tienen el mismo potencial que antes. Aseguró que “la figura del periodista como un `gran cazador blanco´ está muerta”. Y agregó: “Ya no podemos ser sabelotodos. Se terminó eso”. Luego, hizo especial énfasis en las nuevas tareas que un trabajador de los medios de estos tiempos tiene que adoptar. “Hay que trabajar más duro para procesar una cantidad incalculable de datos que antes no existía, para luego transmitirlos”. Y agregó: “Es más que importante que, a pesar de que el tiempo no es el suficiente, un periodista sepa que hay que dedicarse al aprendizaje y a la enseñanza cada semana”.
Johnson destacó también el nuevo papel de los jefes de medios. Aclaró que éstos tendrán que hacerse de empleados con conocimientos y estudios del mundillo digital que ellos mismos no tienen. “Es imposible encontrar hoy a un jefe que tenga todas las habilidades de procesar los datos de esta nueva era digital”. Y pronosticó: “Las empresas periodísticas con una gestión rígida desaparecerán completamente”.
Sobre gran parte de la charla, el docente estadounidense se encargó de destacar el rol de la docencia en estos nuevos procesos, mecanismos y técnicas para el procesamiento y la transmisión de datos de interés periodístico. Y, en base a esto, concluyó con un deseo: “Me gustaría que los profesores de periodismo, en vez de encargarse por diferentes cuestiones del pasado y el presente con respecto a sus enseñanzas, se encargarán más por el futuro”.

Más sobre Tom Johnson:
Trabajó en prensa gráfica y educación superior durante 30 años. Asistió como profesor invitado de Periodismo Analítico a la Universidad de Boston, Massachusetts (Estados Unidos). Antes de unirse al cuerpo docente de la Universidad de San Francisco en 1976, Johnson trabajó en la editorial Scientific American. Realizó un doctorado en Estudios Americanos con foco en la ciencia, tecnología y sociedad en la Universidad de Kansas. También es licenciado en Periodismo de la Universidad de la Trinidad en San Antonio, Texas.
 

martes, 29 de mayo de 2012

Leo is a punk rocker



Marky Ramone, ex baterista de la banda punk neoyorquina Ramones, se hizo presente en el partido que disputaron el Athletic de Bilbao y el Barcelona por la final de la Copa del Rey en España. El músico, que luego de su paso por Argentina en marzo confirmó una nueva visita para octubre de este año, no se privó cual fan de tomarse una fotografía con el mejor jugador de fútbol del mundo, Lionel Messi. "Con Leo Messi en la final de fútbol de Madrid. Una leyenda argentina", expresó Marky en su cuenta de Twitter.

viernes, 25 de mayo de 2012

El supuesto origen judío de Hitler


A más de 70 años del comienzo de la Segunda Guerra Mundial, son varias las teorías y los rumores que aseguran que el genocida y antisemita más grande de la historia, Adolf Hitler, descendería directamente de raíces judías por parte de su abuelo. Según expertos, esto luego desembocó en un profundo odio del caudillo germano para con aquel pueblo, para que más tarde se transformase en el principal promotor de aquella inexplicable matanza que hoy todos conocemos como el Holocausto.

  La historia comienza de la mano de Maria Anna Schicklgruber, abuela de Adolf Hitler, quien trabajaba en Vierna como cocinera en la mansión de una familia judía rica de apellido Frankenberger. El 7 de junio de 1837 dio a luz a Alois, quien luego sería el padre de Adolf Hitler, fruto de lo que pareció ser una relación carnal con un integrante de aquella familia, más precisamente, con el barón de Rothschild.  
  En 1930, Hitler recibió una carta de un pariente que lo amenazaba con revelar los orígenes de su familia; por lo que más tarde, Hans Frank, abogado del jefe del Tercer Reich y posterior gobernador de Polonia, llevó a cabo una investigación encomendada por el mismísimo Führer a raíz de las continuadas sospechas y dudas acerca de su proveniencia. Hitler quería asegurarse de no ser parte de aquel pueblo que aborrecía. De acuerdo a aquella investigación, años más tarde, en el marco de los Juicios Nüremberg y antes de que le llegase su hora de la mano de la horca, Frank expresó algunas palabras en base a la supuesta descendencia judía de Hitler. Veamos una parte de su declaración:Schicklgruber trabajaba para una familia judía llamada Frankenberger cuando dio a luz a su hijo (esto debería leerse “cuando ella quedó embarazada”). En ese momento, Frankenberger pagó a Schicklgruber en nombre de su hijo, entonces sobre diecinueve años, un complemento de paternidad desde el momento del nacimiento del niño hasta su décimocuarto año. Hubo siempre una correspondencia entre esos Frankenberger y la abuela de Hitler, cuya pauta general era el conocimiento común no expresado de los corresponsales de que el hijo de Schicklgruber había sido concebido en circunstancias que responsabilizaban a los Frankenberger a pagar una prestación por paternidad”. En sus memorias desde la cárcel, Frank, que era oriundo de la ciudad de Colonia, se encargó de agigantar este mito dejando por escrito y expresando que Hitler sabía de lo ocurrido con su abuela en el siglo XVIII porque también se lo habían contado sus padres, pero negaba que su abuelo fuera judío ya que aseguraba que, como su abuela y su posterior marido (Johann Georg Hiedler)  eran de la clase más baja de la sociedad, habían engañado al barón de Rothschild haciéndole creer que era el progenitor para que pagara inocentemente por la mantención de la criatura.
 Alois, padre de Adolf Hitler
 
  En 1876, Alois en compañía de tres testigos, presentó un protocolo de legitimación ante un notario de Weitra para cambiar su apellido. Declaró también que reconocía a Johann Georg Hiedler como su padre. Allí, inexplicable y misteriosamente hasta el día de hoy, el apellido de Alois era cambiado de Schicklgruber a Hitler en honor a su padre, que había muerto hacía 20 años (recordemos que en esos tiempos la grafía de los apellidos patronímicos no era fija).
  Ian Kershaw, un historiador británico altamente destacado por sus biografías de Hitler, señaló otras teorías provenientes de la primera mitad del siglo XIX. “A principios de la década del 20 circularon rumores por los cafés de Münich que fueron fomentados por el periodismo sensacionalista de la prensa extranjera durante la década del 30. Se decía que el apellido `Hitler´ era judío, y que `quedaba al descubierto´ que los orígenes de Hitler podían remontarse hasta una familia judía de Bucarest apellidada Hittler”. Sí, con doble T. *(ver nota relacionada al final).
  Con el correr de los años, distintos historiadores y sobre todo organizaciones de ultraderecha, se encargaron de desmentir los testimonios de Frank acerca del misterioso árbol genealógico del mayor dictador que ha dado el planeta Tierra. Pero, la pregunta es: ¿Por qué Hans Frank inventaría una historia así? ¿A dónde quería llegar con semejantes declaraciones horas antes de su condena a la horca? Más dudas que certezas en este mito que tiene como esencia el colmo de los colmos de la historia de la humanidad: un Hitler con sangre judía.












 

lunes, 21 de mayo de 2012

NBA: el décimonoveno jugador de la cancha

Una forma algo especial de llamar la atención del equipo rival por parte de este fanático de los Philadelfia 76ers. Su objetivo: que los Celtics de Boston marren la mayor cantidad de tiros libres posibles. Todo vale en los playoffs de la NBA.

miércoles, 9 de mayo de 2012

Beatriz Busaniche: “No dejemos que la libertad de expresión quede en una negociación entre privados”


  El Foro de Periodismo Argentino realizó el último jueves una mesa redonda compuesta por integrantes de diferentes medios y destacados referentes de las Ciencias Sociales en Argentina, que brindaron sus opiniones y visiones acerca de la libertad de expresión en la era digital. Pirámide sin invertir se hizo presente en esta reunión que tuvo la consigna: Desafíos para la libertad de expresión en internet en Argentina: Cómo pensar el futuro del debate público, el derecho a la información y el periodismo digital en el país”.

  “Hay tres áreas que son claves en lo que concierne a nuestra libertad de expresión en internet. En primer lugar, se encuentra la ciberseguridad, luego, la protección de los menores y, por último, la protección de la propiedad intelectual”, expresó Beatriz Busaniche, miembro de fundación Vía Libre y Wikimedia Argentina y docente de la UBA, que junto a Eduardo Bertoni, integrante del Centro de Estudios en Libertad de Expresión y Acceso a la Información; Mariano Blejman, periodista de Página/12 y miembro de Hacks/Hackers Buenos Aires; Martín Waserman, Analista Senior de Políticas Públicas y Asuntos Gubernamentales de Google para América Latina; y Ariel Torres, editor de la sección Tecnología del diario La Nación, integraron este panel que fue moderado por Eleonora Rabinovich, representante de la Asociación por los Derechos Civiles. Previamente al comienzo del debate entre los participantes, se presentó el Informe 2011 del Monitoreo de Libertad de Expresión de FOPEA, a cargo de Mónica Baumgratz, coordinadora del foro.
  Busaniche optó por poner el acento en la ciberseguridad, uno de los puntos que remarcó sobre el comienzo de su discurso, que luego relacionó directamente con distintas normas que se están tratando en el mundo en cuanto a este tipo de problemáticas. “Hoy hay muchas leyes aprobadas o próximas a aprobar que atentan contra la libertad de expresión en internet. Una de las más peligrosas es la Ley CISPA (Cyber Intelligence Sharing and Protection Act)”. Y, en base a lo que se refiere específicamente este proyecto legislativo norteamericano, agregó: “Esta ley, que esperemos no sea aprobada por el Senado de Estados Unidos, concede una especie de potestad a distintas empresas y organismos de seguridad de aquel país, para intervenir cualquier tipo de comunicación, particular o no, en el entorno digital. Esto podría poner en jaque la libertad de expresión mundial”.
  Más tarde, Torres utilizó su espacio de palabra para construir una mirada casi filosófica y proponer una reflexión sobre la libertad de expresión remitiéndose explícitamente a principios básicos sobre la Declaración de los Derechos Humanos. “El Derecho a la Libertad de Expresión no es un derecho “progre”, como está preestablecido en la sociedad y muchos dicen que es. Esto va más allá: es el derecho más importante de todos, ya que hablar libremente es justamente lo que nos hace humanos”. Y agregó: “Cuando alguien me dice: `Hay un exceso de libertad de expresión´, es como si ese mismo alguien me dijiese: `Hay un exceso a la vida; tal o cual persona está viviendo de más´. No hay diferencias en los conceptos”.
  Sobre el final de la charla, se acrecentó un fuerte debate en relación a la privacidad y la no privacidad de datos en cuanto a las búsquedas en la red, y a la personalización y limitación de los datos suministrados al usuario por parte de los las plataformas más importantes de buscadores digitales. Waserman (analista en la firma Google), defendió a rajatabla las políticas internas de la empresa en cuestión y expresó: “Esto no es tan así. Para discutir sobre estos temas hay que investigar muchísimo con anterioridad. Yo creía que sabía todo sobre estos asuntos, pero cuando entré a trabajar en Google me di cuenta que no”.  Blejman se mostró preocupado por este tema y polemizó con Waserman sobre este punto: “Es necesario que Google cree un software que permita al cibernauta encontrar el contenido que desea, pero con criterio y sentido periodístico. La personalización de los datos obtenidos según el historial grabado del usuario crea burbujas de contenidos que  representan más ingresos económicos a Google, pero que no los transforma en un servicio social, como dicen que son”.